El origen del tequila

El origen del tequila se remonta a la época prehispánica de Mexico y debe su nombre a un pueblo del actual estado de Jalisco que se llamaba en su lengua nativa nátuahl que significaba «lugar de trabajo».

El vocablo evolucionó a la palabra tequila, en referencia a las personas que trabajaban el campo con el cultivo de agave, planta que se utiliza para la creación de esta bebida y de la que existen casi 300 variedades.

El tequila surge como bebida destilada de la fermentación de la planta y recibe este nombre cuando la variedad empleada es el agave azul y proviene de la zona originaria de Jalisco.

La pureza del tequila se asocia a la cantidad de azúcar que contiene exclusivamente del agave. Si no posee azúcar añadido, estaremos ante un tequila de pureza 100%. Y si el porcentaje de otro tipo de azúcar supera el 50%, esta bebida no podrá considerarse tequila.

Cuando el agave seleccionado para crear este licor no es azul sino de cualquier otro tipo, nos encontramos ante el Mezcal. Denominación que se utiliza solo en algunas zonas de México como Oaxaca, Zacatecas o Guerrero, entre otras.

Tipos de tequila

Según el proceso de maduración del tequila encontramos distintos tipos:

1. Tequila blanco: Tras su destilación se ajustan los niveles de notas y alcohol y permanece guardado con un contacto mínimo con la madera.
2. Tequila reposado: Su tiempo de maduración oscila entre los 2 y 11 meses y se almacena en grandes contenedores de roble blanco americano.
3. Tequila añejo: Se caracteriza porque se almacena estrictamente en barricadas de roble blanco americano y su proceso de maduración dura entre 12 y 35 meses. Como consecuencia, el color adquiere tonalidades color ámbar.
4. Tequila extra añejo: Al igual que el resto de tequilas, se guarda en barricadas. Permanece almacenado en proceso de maduración durante un mínimo de 35 meses, periodo durante el cual, el tequila desarrolla un sabor intenso y picante.

5 usos del tequila que te sorprenderán

Pensamos en el tequila y la mente se nos llena de amigos, risa, alegría y buen comer. Sin embargo, ¿sabías que el tequila puede ofrecerte mucho más? Descubre a continuación 5 maneras nuevas de consumir este alcohol:

1. Toma un trago de tequila para aliviar síntomas de la gripe como la tos o la irritación de garganta.
2. Innova en la cocina bañando tu carne con tequila, especias y limón y descubre un toque ácido e intenso en cada bocado. También puedes incorporarlo en la elaboración de vinagretas.
3. Añade un chorreón de tequila a la receta de tus brownies y sírvelo como merienda a la familia. ¡Espera su reacción!
4. Elígelo como bebida preferente si padeces de diabetes. Si su pureza es del 100%, tus niveles de azúcar estarán a salvo.
5. Consúmelo con moderación para experimentar sus efectos relajantes.

Y tú, ¿eres un apasionado como nosotros de esta bebida? ¿Has probado las variedades de tequila que te ofrecemos en nuestra carta? Pincha AQUÍ para descubrirlas.

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